Jaulas para hamster
Control de roedores 2023
Identifica al tipo de roedor que te enfrentas.
Existen alrededor de 539 especies de roedores en el mundo, de las cuales solamente 8 son consideradas como plagas en productos almacenados y 4 como plagas en general. Los 4 géneros de roedores reconocidos en América Latina son Rattus rattus (Rata Negra), Rattus norvegicus (Rata Noruega) y Mus musculus (Ratón Doméstico) de la familia Muridae.
Identificar la biología de estas especies te ayudará a determinar el mejor método de control, ya que cada una tiene características y habilidades que se pueden combatir de diferentes maneras.
Por ejemplo, la Rata Noruega es ágil y puede esconderse fácilmente en sistemas de alcantarillado, además tiene la habilidad de transitar sin respirar por cañerías, lo cual facilita el transporte de enfermedades. Por otro lado, el Ratón Doméstico puede penetrar orificios pequeños y caer desde alturas de 2.5 metros sin causarse daño, lo que hará difícil su localización.
El método que elijas debe tomar en cuenta sus debilidades y usarlas para evitar un aumento en la población de los sujetos antes de que se sigan reproduciendo.
- Físicos: Este es uno de los métodos más antiguos y populares. Consiste en el uso de trampas para atrapar a los roedores y aunque no implica gran costo a nivel material, sí lo hacen en términos de tiempo y mano de obra. Los resultados en términos de reducción de las poblaciones de roedores son virtualmente nulos.
- Biológicos: Es uno de los temas de mayor interés entre investigadores, ya que implica utilizar métodos como la introducción de predadores, enfermedades o parásitos, modificación del hábitat, manipulación genética y variedades resistentes de cosechas para acabar con la población de roedores. No obstante, la mayoría de estas soluciones tienen fallas de teoría o de practicabilidad y no son confiables para la salud de las personas.
- Químicos: A través de estudios, se ha comprobado que el método más efectivo es el uso de rodenticidas, divididos en dos categorías: los agudos o de acción rápida y los crónicos, que actúan lentamente después de varias dosis. Su presentación puede ser en cebos, cereales u otros materiales.